Alto rendimiento laboral

A través de la aplicación de técnicas y estrategias psicológicas podemos mejorar el rendimiento laboral y el bienestar tanto de manera individual como en equipos de trabajo.

El bienestar emocional y el rendimiento poseen relación directa e indirecta con la probabilidad de conseguir las metas y objetivos que nos planteamos.

Por ello, es de gran importancia cuidar el bienestar individual para que el trabajo en equipo sea el idóneo. Aprender a manejar las emociones, gestionar el tiempo y conocer los niveles óptimos de activación que sean necesarias para poder llevar a cabo las tareas a desempeñar, nos ayudará a conseguir los objetivos que nos proponemos a largo plazo.

El descanso es un factor clave para conseguir un estado óptimo de rendimiento, debemos establecer en nuestra rutina un periodo de descanso adecuado.

La motivación ejerce un papel fundamental en el rendimiento tanto a nivel individual como grupal. Conseguir unos estímulos idóneos para realizar las tareas diarias está relacionado con el planteamiento de objetivos.

Los objetivos planteados diariamente deben ser realistas, planteando objetivos de rendimiento más allá de los objetivos de resultados.

• Seguridad psicológica.

La seguridad psicológica nos ayuda a reforzarnos a nosotros mismos y al trabajo grupal a la hora del trabajo, creando vínculos más fuertes y evitando así las consecuencias del sentimiento de no pertenencia:

• Inseguridad: pensar que nuestras capacidades no están a la altura de los demás miembros.
• Desmotivación: Creer que mejorar el trabajo individual no va a suponer un cambio relevante.
• Insatisfacción. Minusvalorar las aportaciones propias y evitar realizarlas para no sufrir una situación ridícula.

Estas circunstancias suelen ser muy habituales, destacando en equipos de alto rendimiento.

La seguridad psicológica se puede fomentar a través de diferentes procesos:

• Generar espacios propios. Es importante que cada empleado tenga su espacio para hablar y aportar ideas, comenzando con espacios pequeños donde el propio trabajador lo expanda fuera de su zona de confort.
• Debemos tener en cuenta todas las ideas aportadas, valorando el papel de cada miembro y el tuyo propio.
• Comunicación. Cuando existe una comunicación fluida en el entorno de trabajo, todos se ven capacitados para aportar ideas y comentar sus impresiones.

El talento personal es la combinación de la aptitud, la actitud, el aprendizaje y la pasión.

El entrenamiento para el alto rendimiento laboral exige la superación de hábitos y aprendizajes inconscientes, la desactivación del pensamiento y creencias limitantes, focalización de la mente y un estado mental adecuado. Este entrenamiento nos proporciona una mayor fuente de recursos personales y nos posibilita la ampliación de la percepción.

El entrenamiento en la gestión del talento nos permite ofrecer un entrenamiento de la atención de los diversos procesos personales y profesionales y en los niveles de experiencia de quienes se entrenan permitiéndoles generar estructuras personales, grupales y contextuales para conseguir la excelencia y plenitud.

Desde Psicopotencial queremos ayudarte a cumplir todos tus objetivos a nivel personal y profesional.  Soy Rafael Medina, especialista en alto rendimiento laboral y juntos conseguiremos explotar al máximo tu potencial. Si necesitas más información sobre nuestros servicios, contacta ahora con nosotros. ¡Estaremos encantados de atenderte!